- El objetivo de este estudio fue identificar los factores de riesgo asociados a las mordeduras faciales de perro en humanos y discutir las estrategias de prevención.
- Se realizó un análisis retrospectivo de mordeduras faciales de perro tratadas en el Hospital General de Massachusetts de 1997 a 2018 a través de su Registro de Datos de Pacientes y se valoraron ciertas variables predictoras como características demográficas, información circunstancial sobre la lesión y características del perro. Otras variables del estudio fueron las heridas y los tratamientos específicos, y el seguimiento.
- En total, se identificaron 321 pacientes (edad media 29,5 años; rango 0,7-81 años). Había 141 hombres y 180 mujeres. La mayoría de los pacientes eran adultos (edad > 18 años; n = 223 [69.5%]). La mayoría de los perros (n = 281 [87,5%]) eran conocidos por los heridos (P < .00001), y se encontró que hubo alguna provocación en 207 casos (64,5%; P < .00001). Las mordeduras fueron precedidas por los siguientes comportamientos: jugar con el perro, alimentar al perro y colocar la cara cerca del perro. Los pitbulls lideraron en el número de mordeduras (n = 26 [8,5%]). La ubicación en la cara más predominante fue el tercio medio o inferior (n = 299 [93,1%]).
- Los resultados de este estudio sugieren que debe haber una educación de los dueños de los perros, padres e hijos enfocada a evitar comportamientos conocidos que pueden provocar al perro. Esto puede ayudar a disminuir la incidencia de estas lesiones destructoras.
Zhu N, Cruz Walma A, Troulis MJ, August M.








